El dólar como medio de pago es la más usada, pues representa 44% de transacciones y es considerada la divisa de reserva mundial.
Con el paso de los años ha cimentado su posición como el depósito preferido de los ahorros globales, el refugio en épocas de crisis y el medio para el intercambio de materias primas.
Historia del dólar
Haciendo un poco de historia, el Gobierno de los Estados Unidos, mediante decreto a partir del 2 de abril de 1792, creó como unidad de circulación al dólar y sus primeras monedas salieron 2 años más tarde hechas en la Casa de Filadelfia.
El dólar es la primera unidad de dinero que fue dividida en unidades decimales: un dólar igual a cien centavos. Hoy, la mayoría de países usan un sistema decimal similar.
El nacimiento de esta moneda es político, pues proviene de las consecuencias de la Segunda Guerra Mundial. En ese entonces, las divisas globales tenían su respaldo en el oro y cada gobierno garantizaba que su dinero tenía un valor para cierta cantidad de oro.
En 1944, el acuerdo de Bretton Woods, creó el Banco Mundial y Fondo Monetario Internacional (FMI) y estableció el dólar estadounidense como el nuevo oro.
El mercado lo ha seguido eligiendo como la divisa favorita por cuatro puntos básicos:
- La solidez de la economía estadounidense.
- La creencia generalizada en el modelo estadounidense financiero.
- La confianza sobre las instituciones políticas y financieras de EE.UU.
- El papel de Liderazgo de Estados Unidos en los asuntos internacionales.
Para prolongar la supremacía del dólar y los beneficios de ésta, se debe cuidar en primer lugar la estabilidad macroeconómica, es decir, las principales variables agregadas de la economía deben exhibir una volatilidad mínima.
El dólar como medio de pago
La preferencia mundial por el dólar estadounidense como medio de pago, unidad de cuenta y depósito de valor obedece al hecho de que esta unidad monetaria es ampliamente utilizada en todas partes, tiene bajos costos de transacción dado que su diferencial cambiario o spread es comparativamente bajo, es fácil de comprar y vender en diferentes países y regiones, y mediante su poder de compra a lo largo del tiempo.
Además, tanto los agentes económicos privados como las instituciones gubernamentales tienden a adoptar como moneda internacional aquella que ya se encuentra plenamente establecida en todas partes.
En conclusión, lo largo de los años la, la moneda estadounidense ha sido elegida para transacciones internacionales y como moneda de reserva por el liderazgo en la economía mundial de EE.UU. a lo largo de los años, y cuyo origen se dió desde finales de la Segunda Guerra Mundial.